La amenaza de los deepfakes 

A finales del año 2017 un usuario que se hacía llamar "deepfake" revoluciono con su vídeo la plataforma de "Reddit". En dicha grabación aparecía Gal Gadot, una de las estrellas más deseadas de Hollywood famosa por protagonizar la pelicula de "Wonder Woman". Sin embargo, en este caso la escena poco tenía que ver con las hazañas de la superheroina de Marvel. Gal Gadot aparecía en el vídeo protagonizando una escena de contenido sexual. Obviamente, no se trataba de la verdadera actriz, sino un montaje digital que utilizaba la inteligencia artificial para crear vídeos muy realistas. Desde aquel momento, los "deepfakes" se han convertido en uno de los contenidos más populares de Internet. Sin embargo, para las estrellas de Hollywood, los profesionales de la industria del porno, las celebrities o los políticos, la irrupción de esta práctica ha supuesto un verdadero quebradero de cabeza. Ahora deben hacer frente a amenazas como la extorsión por parte de personas anónimas.

En los últimos años, redes sociales como Facebook e Instagram anunciaron su total prohibición en sus respectivas plataformas. Por otro lado, administraciones tan poderosas como la norteamericana invierten cada año millones de dólares para limitar la visibilidad de los deepfakes y detectar a sus autores. Y es que los avances tecnológicos que han permitido esta práctica están dañando seriamente la imagen de políticos y estrellas de Hollywood. Además, los protagonistas de las películas para adultos y las actrices de webcams porno denuncian que los deepfakes están mermando sus ingresos mientras utilizan su imagen sin su consentimiento.

¿Cómo funcionan los deepfakes?

Scarlett Johansson, Maise Williams, Taylor Swift o Donald Trump son solo algunas de las caras más visibles que ya han protagonizado algún "deepfake". Los autores de dicho contenido comienzan obteniendo los rostros de los personajes públicos a través de imágenes de Google o vídeos de YouTube. Posteriormente, activan la técnica del "deep learning" que por medio de unos algoritmos permite al programa aprender todo sobre el rostro de la persona y sus gestos. Al mismo tiempo, los algoritmos revisan el vídeo porno que el autor haya escogido para el "deepfake". Por último, ambos contenidos se organizan y mezclan para dar lugar a un vídeo porno con el rostro de la persona escogida totalmente convincente. La técnica del "deep learning" no es algo nuevo pues se usa desde hace bastante tiempo en Hollywood donde se lo denomina CGI (imágenes creadas por computadora). Películas como "Terminator", "Parque Jurásico" o las últimas de "Star Wars" han usado esta técnica en grandes proporciones.

Preocupación en Hollywood

Quienes consumen estos contenidos denuncian ser víctimas directas de estafas. Sin embargo, los que de verdad sufren esta práctica son los protagonistas de los "deepfakes". Actrices, actores, celebrities o políticos, pueden ver cómo ahora son protagonistas de vídeos porno donde se les maltrata física y psicológicamente. No en vano, de los más de 15.000 vídeos encontrados en septiembre de 2019 de esta índole (según "The Guardian") el 96% eran de contenido pornográfico. Por si no fuera suficiente, en muchos de los "deepfakes" podemos encontrar a personalidades públicas protagonizando escenas sexuales denigrantes y xenófobas. Sin duda un contenido que atenta contra su persona y su dignidad, dejándolos expuestos al mayor de los ridículos públicos.

Los avatares del porno

Como es obvio, la industria del cine para adultos no es ajena a los "deepfakes". Y es que durante la creación de estos vídeos sus autores juegan con los cuerpos de los actores y actrices porno, así como el de algunas modelos de webcams porno. Esto ocurre por la propia naturaleza de los deepfakes. Para lograr un resultado convincente los algoritmos cortan partes de los cuerpos de estos profesionales y los ensamblan después al estilo Frankenstein. Además, también denuncian que sus cuerpos son utilizados para humillar a personas públicas, lo cual acaba repercutiendo en sus trayectorias profesionales.

Para más inri, tanto las estrellas de Hollywood como los actores, las actrices y las modelos de webcams porno tienen que enfrentarse a extorsiones económicas. Por ejemplo, a las actrices de cine se las amenaza con divulgar "deepfakes" con su imagen. Mientras tanto, se coacciona a los profesionales del cine para adultos mediante el uso de sus cuerpos sin cabeza para protagonizar cualquier escena denigrante. Todos estos problemas suponen un reto para las autoridades competentes e instituciones legales a la hora de impedir que este uso ilegítimo de datos personales y contenidos digitales se extienda con total impunidad.

Los deepfakes son una amenaza para todos

A pesar de que esta práctica utiliza principalmente la imagen de estrellas de cine y profesionales del porno, lo cierto es que todos podemos ser víctimas de un "deepfake". Por ejemplo, los "deepfakes" más avanzados pueden imitar a la perfección el rostro de las personas y utilizarse para engañar a sistemas que usan el reconocimiento de rostro. De este modo, estaríamos frente a un delito grave de suplantación de identidad. Por otro lado, nosotros también podemos ser víctimas de un vídeo porno con nuestro rostro como les ocurre a las actrices eróticas y a las modelos de webcams porno. Aunque poco probable, siempre cabe la posibilidad de que alguien nos extorsione con esta práctica. Además, los deepfakes suponen graves problemas para la seguridad de los países al difundir propaganda e interferir en elecciones.