Webcam Lilith Barcelona

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Me llamo Lilith Barcelona, vivo en España. Mi altura es 160cm y tengo 39 años. Mis ojos son de color verde, mi pelo es de color castaño y tengo la tez mulata. Seguro que estás deseando verme en vivo en mis shows de webcamer, pero te contaré algo más sobre mi.

Las dobles penetraciones vaginales no son algo que me entusiasmen, y prefiero mostrarme en otro género de escenas que me ponen más cachonda. Tengo un lema, y es que en mi coño solo cabe una cosa, es decir, no me verás haciendo dobles penetraciones. Aunque puedo llegar a estar muy cachonda, las penetraciones dobles vaginales no son lo mio.

El sexo anal es una de esas prácticas que no me gusta, no suelo practicarlo puesto que me cuesta llegar al orgasmo casi siempre. Siempre que me solicitan un anal, mi contestación es negativa, no me meto nada por el culo en directo por el hecho de que no me estimula.

No necesitas tener una calidad de alta definición para disfrutar de mi sala de videochat. Soy una webcammer con muchas ganas de sexo y totalmente capaz como para sacar todo de ti. Accede ya a mi cam y descubre todo lo que puedo hacer por ti.

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Mis tetas son totalmente naturales. No lo dudes!, son reales y naturales.

Pese a que adoro a las lesbianas, no tengo por costumbre efectuar espectáculos lésbicos en mi cam. Tengo amigas lesbianas, me chiflan, pero no me verás en directo con otras tías puesto que tengo otras facetas más calientes para enseñarte.

Siento decirte que el sexo interracial no es parte integrante de mis shows.

No voy depilada, soy de esas que creen que es más divertido al natural, así que si te agradan las peluditas, seguro que te encantaré. Si te mola el pelo y eres de los que las prefiere peludas, entonces mi cámara web te volverá loco. No me agrada ir depilada, quiero que haya pelo y se vea todo como es.

La medida de mis pechos es la L. Una L, ese es el tamaño preciso de mis pechos.

Me gusta el sexo duro, y el BDSM está dentro de mis predilecciones preferidas en el momento de follar. Adoro el BDSM, es algo que me pone muy cachonda el poder sodomizar a otra persona. El BDSM entra dentro de mis prácticas sexuales comunes.