Webcam Martina Vizcaya

Martina Vizcaya webcam porno

Me llaman Martina Vizcaya, vivo en España. Mi altura es 169cm y tengo 25 años. El color de mis ojos es el marron, el color de mi pelo es castaño y mi piel de color negra. Te voy a explicar varias cosas más sobre mi antes de dejarte gozar de mi video-show.

No voy depilada, soy de las que consideran que es mejor todo al natural, conque si te molan las peludas, te encantaré. Si te mola el pelo y eres de los que las prefiere peludas, entonces mi cam te volverá encantará. No me agrada ir depilada, prefiero que haya pelo y se vea todo tal y como es.

La medida de mis tetas es la L. Una L, ese es el tamaño preciso de mis tetas.

A pesar de que adoro a las lesbianas, no tengo por costumbre efectuar espectáculos lésbicos en mi cam. Tengo amigas lesbianas, me chiflan, más no me vas a ver en directo con otras chavalas ya que tengo cosas más calientes para mostrarte.

Videochat erótico Martina Vizcaya

No es necesario tener una calidad Hd para deleitarte de mi sala de videochat. Soy una cam girl con muchas ganas de sexo y totalmente capaz como para sacar todo de ti. Entra ya a mi web cam y encuentra todo lo que te estás perdiendo.

Mi pecho es operado. Tengo las tetas operadas y seguro ya lo habrás notado, ¿verdad?

Las dobles penetraciones vaginales no son algo que me emocionen, y prefiero mostrarme en otro tipo de escenas que me ponen más cachonda. Tengo un lema, y es que en mi coño solo cabe una cosa, es decir, no me vas a ver haciendo dobles penetraciones vaginales. Aunque puedo llegar a estar muy cachonda, las dobles penetraciones no me gustan.

Me agrada el sexo duro, el BDSM está en mis predilecciones favoritas a la hora de practicar sexo. Adoro el BDSM, es una cosa que me pone muy caliente el poder sodomizar a otra persona. El BDSM entra en mis prácticas sexuales habituales.

El sexo interracial es parte integrante de mi. Me gusta el sexo interracial y no pensaría ni un instante en poder disfrutar de un buen negro.

El sexo anal es una de esas prácticas que no me da placer, no suelo practicarlo puesto que me cuesta alcanzar el clímax prácticamente siempre. Siempre y cuando me piden un anal, mi respuesta es negativa, no acostumbro a meterme nada por el culo en directo por el hecho de que no me estimula.